Cuartel General en Guayaquil, a 4 de agosto de 1823.
Secretaría General de S.E. el Libertador
Al Honorable Señor Miguel Santamaría, Enviado Extraordinario y Ministro Plenipotenciario de la República de Colombia cerca del gobierno Supremo de Méjico.
S.E. el Libertador Presidente de la Repúb1ica de Colombia, animado siempre del más vivo interés por la independencia de la América y cediendo a las repetidas invitaciones del Congreso constituyente del Perú, se ha prestado a encargarse de la dirección de la guerra en aquel Estado, que se encuentra en una posición difícil después de la derrota de su ejército en Moquegua. Sin embargo las ventajas del enemigo han sido precarias porque S.E. el Libertador hizo volar en auxilio del Perú las armas victoriosas que han pacificado el Sur de Colombia y mañana marcha a dirigir [por él, la senda de la victoria] [1] personalmente el ejército Unido Libertador del Perú, como [su] [2] generalísimo de las [armas] [3] fuerzas aliadas. El Congreso del Perú ha conferido a S.E. ilimitadamente el Poder Supremo en las materias de guerra, y en los ramos de que emanan los elementos para darle el impulso propio de su genio.
S.E. el Libertador que prevé los más remotos sucesos, y que aspira a que las nuevas potencias [poderes] [4] de América se hagan acreedores al respeto de las naciones antiguas y muy particularmente a la España, por la razón o por la fuerza, ha creído conveniente invitar al gobierno Supremo de Méjico, a tomar parte en el exterminio de las fuerzas enemigas que [existen todavía] [5] prolongan todavía una guerra sin objeto en el Perú. Con este [objeto] [6] designio ha autorizado plenamente al señor Coronel Bernardo Monteagudo para que en calidad de Enviado Extraordinario y Ministro Plenipotenciario cerca del gobierno Supremo de Méjico le pida los auxilios [necesarios [7] militares para el Perú. Parece tanto más de esperar que no sean vanas estas pretensiones cuanto su cumplimiento será la más segura garantía de la liga general proyectada, que es el objeto cardinal de la misión de V.S. en aquel [opulento] [8] importante país.
También se encarga al señor Monteagudo que poniéndose de acuerdo con V.S. y formando un solo cuerpo de legación para este fin, promueva la reunión de Méjico a la Federación General proyectada, por medio de un Congreso General de Plenipotenciarios de los Estados de esta América antes española.
Las luces y el celo, que han distinguido siempre la carrera pública del señor Monteagudo en el sostenimiento de la independencia hacen esperar a S.E. el Libertador los mejores resultados de esta misión y no duda que reunida a V.S. será muy útil al progreso de la política de nuestro Gabinete, en beneficio de los intereses generales y comunes del nuevo mundo.
Al paso que cumplo las órdenes especiales de S.E. el Libertador dirigiendo a V.S. esta credencial, me es honroso y satisfactorio anunciar a V.S. un Enviado digno de los objetos nobles que antes de ahora ha encomendado a V.S. la República de Colombia.
Dios guarde a V.S.
[JOSÉ GABRIEL PÉREZ]
* De un copiador del Archivo del Libertador. Sección O’Leary. Tº XX, 370 al 371.
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