Cuartel General en Riobamba a 25 de junio de 1823, 13°
Al Señor Intendente del Departamento de Guayaquil. Con esta digo al Coronel Diego Ibarra que vuelva inmediatamente a Guayaquil para que reciba de V.S. en primer lugar cien hombres escogidos de los que no puedan desertar en este departamento como son los Samarios, Tumaco, los de Cuenca que sean veteranos y alguno que otro granadino, venezolano o istmeño que haya quedado aún. Estos cien hombres vendrán organizados en una compañía de fusileros, armados y equipados lo mejor posible. En segundo lugar va a buscar el Coronel Ibarra todo oficial suelto, de Teniente Coronel abajo, sea de caballería o infantería, y aun pedirá a V.S. aquellos que aunque estén destinados, no hagan gran falta en ese Departamento. El objeto que se tiene con esos oficiales es formar una columna que quede en reserva para cualquiera evento. 3° El Coronel Ibarra traerá además cuatrocientos fusiles, veinte mil cartuchos y dos mil piedras de chispa con un oficial de artillería para que cuide el mecanismo de este pequeño depósito. 49 El Coronel Ibarra no estará en esa ciudad cuarenta y ocho horas y V.S. deberá prestarle todos los auxilios que se han pedido anteriormente a fin de que no se dilaten en el camino ni en ninguna parte. En su marcha el Coronel Ibarra dará órdenes a la Bodega para que le tengan preparado todo lo necesario para cuando vuelva con los objetos de su expedición.
Dios guarde a V.S.
BOLÍVAR
* De un copiador del Archivo del Libertador. Sección J. de F. Martín. T° II, Fº 19.
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