Barinas, mayo 12 de 1821.
Al Señor Gobernador Comandante General de Mérida.
Anoche recibí oficio de V.S. de 8 del corriente que condujo el comisionado de V.S. para recibir Jos dos mil pesos destinados al mantenimiento de ese hospital. El regresa hoy sin aquella cantidad, porque a su llegada ya había marchado con ella, para entregarla a V.S., el mismo oficial que trajo el dinero de Bogotá. Puede reclamarle los dos mil pesos a su paso por ésa.
S.E. ha celebrado la remisión del parque para Trujillo. Parece que el predecesor de V.S. había asegurado que los fusiles descompuestos podían componerse ahí. Si hubiere armeros que lo hagan, tomará V.S. un interés particular en la composición pronta de ellos; pero si no los hay, quiere S.E. que remita V.S. a Cúcuta, a disposición del Comandante General de los Valles, todos los fusiles descompuestos que haya, remitiéndolos al cargo de personas de confianza que los conduzcan con cuidado y seguridad, para que no se pierdan, no se deterioren más, ni se detengan demasiado en el tránsito.
Es muy sensible y extraña S.E. que avisando V.S. la remisión del parque que había en esa ciudad, para Trujillo, no exprese V.S. la cantidad de municiones, de fusiles y de piedras de chispa que hayan ido. Así es que no puede calcularse si el Coronel Carrillo necesita, o no, más. Tampoco ha dicho V.S. de qué fuerza consta la columna que avisa haber pasado ya para Trujillo, y este número es también necesario para el arreglo de las operaciones. También ha olvidado V.S. enviar el estado de los hospitales, que desea S.E. ver para dar las órdenes acerca de ellos. Para lo sucesivo tendrá V.S. entendido que cada ocho días, lo más tarde, debe V.S. dirigirme un estado circunstanciado y prolijo del número de enfermos que haya, con expresión de los cuerpos a que pertenecen, y si es posible, su enfermedad y gravedad. Se añadirá además el número de convalecientes que haya y su estado de salud para que se les dé el destino conveniente. Al mismo tiempo, es decir, cada ocho días, dará V.S. parte de todo lo que haya ocurrido en todos los ramos de Gobierno que le están encargados; pero particularmente en el militar, detallando y especificando prolijamente cuanto tenga relación con el eiército, bien sean objetos que existan en esa Provincia, o bien que vengan para el ejército de cualquiera otra parte.
Por el atraso que tuvo mi comunicación del 30, verá V.S. el mal servicio que hacen todas las casas de posta. Debe V.S. cuidar muy particularmente de examinar las causas del retardo de las comunicaciones, para corregirlo, castigando severamente a los que sean culpables de él.
S.E. ha sabido que el Capitán Crispín Alcalá ha marchado para esa Provincia a curarse, y que en el tránsito ha esparcido mil noticias falsas indecorosas al Gobierno. S.E. quiere que le reduzca V.S. a un arresto por tiempo indeterminado hasta que se le ordene su libertad.
Lo comunico a V.S., etc.
Dios guarde a V.S. muchos años.
PEDRO BRICEÑO MÉNDEZ
*Archivo del Libertador. O’L. Vol. XVIII, primera pane, f°243 vto. y 244.
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