Secretaría General.
Duplicado.
Cuartel general en Pativilca, a 15 de febrero de 1824.
Al señor general Antonio José de Sucre, &., &., &.
Señor general:
Por la copia adjunta se impondrá V.S. de lo acaecido finalmente en la capital. Un contagio de esta naturaleza es lo más terrible que debe temerse; y cualquiera principio de desorden e inmoralidad que llegue V.S. a notar en el ejército de su mando, debe V.S. castigarlo ejemplarmente con la última severidad, pues para ello reside en V.S. autoridad bastante.
Acelere V.S. el cumplimiento de las instrucciones de S.E. el Libertador; pues los enemigos habiéndose encontrado en el Callao con las "Guayas" y el "Balcarce" que armarán dentro de dos meses, y habiendo tomado la fragata "Rosa" ya armada en guerra, y el bergantín corsario del señor Thorne estarán a mediados de abril, a más tardar, en aptitud de expedicionar indistintamente en las costas del Perú y Colombia, y hacer una incursión al centro mismo de la república de Colombia.
Disponga V.S. que el ejército se den raciones abundantes, pues por ahora sobran víveres y para después no faltarán. Hay vehementes sospechas de que la "Prueba" y el bergantín "Congreso" pueden sublevarse.
S.E. marcha mañana para Trujillo. Probablemente no quedará tropa en estos puntos. Un piquete de Húsares quedará en Casma.
Dios guarde a V.S.
Señor general.
[JOSÉ D. ESPINAR]
En los folios 183 y 184 se halla el Triplicado, firmado también por Espinar.
(Del facsímil).
(Copia).
Chancay, febrero 13 1824,
viernes a las 9 de la noche.
Mi general:
Acabo de llegar aquí. Esta mañana a las nueve salí de Lima y el motivo es el siguiente: Los Granaderos a caballo habían recibido orden como Vd. sabe de acercarse a la capital para disponer de 50 de ellos y enviar los demás al norte o al cuartel general mismo. Anoche de Lurín sin entrar en la capital se dirigieron por otro camino y fueron a Bella-vista habiendo antes prendido a Bruix y a sus otros oficiales. Esta noticia la llevaron a Lima esta mañana algunos granaderos que no quisieron seguir a sus demás compañeros. La conducta de estos granaderos es bien sospechosa porque la prisión de sus oficiales y la dirección a los puntos de Bellavista, salvando los nuestros, textifican sus designios, o de incorporarse a los facciosos, o de saquear esta capital. Lo primero me parece cierto. Toda esta relación me la hizo el general Martínez que me dijo que dentro de dos horas iba a abandonar la ciudad.
Soy de Vd. su secretario y servidor.
PÉREZ
Es copia.
ESPINAR
* De un impreso moderno. Correspondencia del Libertador" (1819-1829). Fundación Vicente Lecuna. Banco de Venezuela (Caracas 1974), págs. 130-131.
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