San Cristóbal, junio 6 de 1820.
Al Gobernador Comandante General de Pamplona.
S.E. el Libertador ha sido informado de que en el hospital militar de Pamplona existen algunos inválidos que desean retirarse a sus casas. S.E. faculta a V.S. para que examinando los que sean verdaderamente tales, y los que puedan fácilmente restablecerse, los licencie V.S. del servicio, siempre que ellos lo pidieren, o se conformen sin repugnancia.
Lo digo a V.S. para su cumplimiento de orden de S.E. Dios guarde, etc., etc.
PEDRO BRICEÑO MÉNDEZ
* Del copiador de la Secretaría. Archivo del Libertador, O’Leary, tomo XVII, folio 28, segunda parte.
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