Barcelona, febrero 1° de 1817. 7°.
Al Almirante.
Por el oficio [1] de V.E. de ayer que condujo el corsario El Alacrán, quedo impuesto de la llegada de una parte de la escuadra a esa Isla [2]; y de que dicho falucho conduce 20 barrotes de plomo y 10.000 piedras de chispa, que aún [3] no he hecho desembarcar.
V.E. habría hecho un singular servicio a la República si me hubiera enviado en este falucho cuantos objetos de guerra hubieran cabido a su bordo, de los que condujo la escuadrilla. En todos mis oficios he significado a V.E. mi ansia por estos objetos, y que sin perder momentos me los enviase luego que llegara la escuadra en los mismos buques [4], pues los necesito con urgencia, y mucho más ahora que mi ejército se aumenta diariamente. De consiguiente, ordeno a V.E. que a la mayor brevedad posible me envíe todos los buques que haya en esa Isla y hayan llegado, con cuanto hayan traído: pues no [5] me es posible mandar ninguna de las flecheras ni los esquifes armados porque los necesito absolutamente sobre la costa.
Con el falucho Alacrán mandaré a V.E. todo el ganado vivo [6] y maíz que pueda llevar.
He mandado que se corten la majagua y trozos de madera que V.E. me pide [7] para remitirlos con las tablas.
No me es posible enviar las 2 piezas de a 18 que V.E. me pide porque todas las necesito para la fortaleza [8] que he construido en esta ciudad, habiendo recogido cuantas había en toda ella, y aun las de la boca.
No es posible tomar medidas más eficaces que las que yo he empleado hasta aquí para formar mi ejército, y al fin lo he conseguido. No sólo he repuesto mi pérdida de Unare, sino que tengo fuerzas dobles a las que fueron [9] batidas en aquella jornada. Igual actividad he empleado para solicitar víveres: lo he conseguido también, aunque ha sido necesario a veces tomarlos con las armas en la mano. Hoy ha salido de esta plaza una División a batir los bandidos de Unare que han invadido los pueblos [10] vecinos a esta capital, porque están ciertos de que son débiles sus guarniciones. Me prometo mil ventajas de esta operación de que he encargado a un General tan valiente como práctico del terreno donde debe obrar.
Antes he dicho a V.E. y ahora [11] lo repito, que estoy resuelto a esperar los enemigos aquí para aprovecharme de las ventajas de mis trincheras y esperar los poderosos auxilios de las Divisiones de Cumaná y los Llanos para batirlos en estas inmediaciones.
Necesito pues de cuantos elementos de guerra han venido; y necesito de cuantos buques haya en esa Isla, de transporte y guerra.
Sólo cuento con el ganado que espero del Chaparro, donde he pedido 3 ó 4.000 reses, para nuestras más principales atenciones; no siendo posible por ahora contar con otra cosa; a pesar de que se empleen los medios más violentos y extraordinarios. Así es que yo no tengo, ni he podido conseguir, dinero alguno para las más pequeñas e indispensables necesidades.
Dios, etc.
[BOLÍVAR.]
* Del copiador. Archivo del Libertador, vol. 23, fol. 90 v° 91. Escrito de letra de José Gabriel Pérez. Para las características del libro copiador, véase la nota principal del doc. n° 1740.