Soatá, octubre 15 de 1821.
A S.E. el General F. de P. Santander.
Mi querido general:
Acabo de recibir en este momento la agradable noticia de la toma de Cartagena. En consecuencia voy a escribirle a Montilla confidencialmente que prepare una expedición contra el Istmo; mientras que usted le ordena oficialmente lo que debe ejecutar para la ejecución de este plan. Yo pienso que en caliente debe hacerse esto porque de otro modo se resfrían todos y después no se hace nada. Nombre usted el general o jefe que debe mandar esta expedición, teniendo presente que Montilla no puede ir porque está muy malo, según me dice. No sé si Rieux [1] será bueno, pero de todos modos deberá organizar la expedición bajo las órdenes de Montilla. Si le parece a usted bien mandaremos a Valdés, aunque no me gusta mucho por su carácter. Sea lo que se fuere ordene usted de oficio la ejecución de esta expedición, pues cuatro mil hombres que había en la costa bien pueden dar dos mil para Portobelo. Yo creo que no debo cambiar en nada mi primer plan para asegurar de todos modos la toma de Quito. De otro modo arriesgaremos una nueva campaña del sur.
La cosa de Ocaña es muy conveniente terminarla a la amigable y recomiendo este negocio para que usted no deje de dar sus pasos antes de llegar a Bogotá.
Adiós, mi querido general; mande a su afectísimo amigo que lo ama de corazón,
BOLÍVAR
¿La paz viene pronto y el Istmo no es todavía nuestro?
* Archivo Santander, VII-176.
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