Quito, enero 29 de 1823.
Al Señor Gobernador de Cuenca.
Con esta fecha se dan órdenes para que el batallón Vargas marche a esa ciudad, y en consecuencia S.E. dispone lo siguiente:
1°—Que V.S. tome con la anticipación debida las medidas que crea convenientes para que el expresado batallón no tenga la menor pérdida y sufra lo menos posible en su movimiento que debe ser por el Naranjal.
2º—Que licencie V.S. inmediatamente la Compañía de Riobamba dejando sólo [estos] [1] en el servicio a los venezolanos y cundinamarqueses, entendiéndose por tales hijos de la otra parte del Juanambú, y además a los que haya del Perú, y que [a] [2] éstos que deben quedar los destine V.S. como efectivos al Batallón Vargas.
3º—Que deje V.S. archivadas las filiaciones de todos los licenciados para echar mano de ellos, si alguna vez la nececsidad lo exige.
4º—Que a los militares de cualquier clase que sean, se le den sólo sus dos tercios de paga, descontando de ellos a la tropa el vestuario y raciones, y que a los oficiales que no tengan destinos, no se les dé más que media paga, lo mismo que a todos los empleados civiles.
5º—Dispondrá V.S. que marchen a sus respectivos departamentos todos los oficiales sueltos que haya en toda esa Provincia.
6º—Que si los ingresos de esas cajas no alcanzaren a cubrir los presupuestos, tome V.S. cuantas medidas le dicten su celo y su interés por el servicio para que a la tropa no le falten sus haberes, entre las cuales medidas quiere S.E. que en el último caso exija V.S. a las Provincias de su mando, raciones para la tropa procurando que en los repartimientos haya justicia y equidad.
Dios guarde, &.
JOSÉ GABRIEL PÉREZ
Adición:
Todos los individuos que haya en esa Provincia pertenecientes al Batallón Boyacá, deben también pasar como efectivos de Vargas.
* De un copiador del Archivo del Libertador. Sección O’Lleary. Tº XIX. Fº 465 vto.
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