Bogotá, 21 de Setiembre de 1827.
SEÑOR : FERNANDO PEÑALVER.
Mi Querido Peñalver:
Por el correo pasado escribí a Vd. una larga carta participándole mi arribo a esta capital y de haberme hecho cargo del gobierno, en que continúo con bastante sosiego aunque lleno de dificultades como Vd. se lo podrá imaginar. Yo tuve la fortuna de dejar a Colombia, si no rica al menos con crédito, y ahora la encuentro empeñada y pobre, esto es lo de menos si la discordia no la dividiera y si las pasiones no la precipitasen. Sin embargo, yo no desmayo y procuro hacer cuanto me sea posible en obsequio de esta patria que tan mal nos paga. La gran convención ha sido convocada como Vd. sabe, y el congreso ha dado ya el reglamento de elecciones. Vd., mi querido Peñalver, que es una persona de tanto influjo en este país, debe interesarse en que se elijan personas que miren por el interés nacional; y si Vd. mismo pudiera venir ¡cuánto ganaría Venezuela!! Esta es la última suerte de Colombia y si la perdemos todo se pierde.
En Caracas circulaban multitud de papeles contra mí, los cuales he visto con bastante desprecio. Si mis amigos quieren defenderme ellos pueden hacerlo, que yo, mientras tanto, seguiré la senda que me ha conducido hasta ahora. El infame "Colibrí" y la horrorosa "Noche" decían que yo venía a repetir la escena de los quinientos. ¡Perversos! Tal vez así lo han deseado por causas que Vd. no ignorará.
Memorias a los amigos y Vd., querido Peñalver, créame suyo de corazón.
BOLÍVAR.
RSS 2.0