Ciudadano Cristóbal de Mendoza, etc.
La empresa que las armas de mi mando tomaron a su cargo ha sido coronada del modo más feliz por las capitulaciones [1] que ayer he concluido con los enviados que al efecto me dirigió el Gobernador de Caracas [2]. En virtud de ellas se me entrega la capital y sus pueblos, con las armas y municiones que hay en ellas, sin que me vea obligado a verter la sangre de nuestros hermanos. De este modo ha sido terminada la campaña, y la libertad se ha restituido a Venezuela.
Yo marcho inmediatamente a poner en ejecución los tratados celebrados, y VS. debe volar a concurrir por su parte a la reorganización del Estado, que como Gobernador de él está a su cargo, debiendo dirigirse a la capital, porque ésta sea la primera que sienta su benéfico influjo.
La República espera de su actividad y patriotismo que tomará el mayor interés por ella, y que acelerará sus marchas cuanto sea posible, para llegar a Caracas con la brevedad que las piden, y en que tanto se empeña la salud de aquella benemérita ciudad, su Provincia y la República entera.
Dios guarde a VS. muchos años.
Cuartel General de La Victoria, agosto 5 de 1813.
SIMÓN BOLÍVAR.
* De un impreso moderno. O’Leary, Memorias, XIII, p. 331, da el texto del documento que dice haber tomado del "Libro de Órdenes". La Comisión no ha podido examinar el original. Sobre el destinatario, véase la nota principal del doc. N° 231, en la correspondencia personal.