Boletín del Ejército Libertador. N° 27.
Las Divisiones de Occidente siguen obteniendo gloriosos sucesos. El día 8 del corriente ocupó el Coronel Villapol [1] a Barquisimeto [2], bastando la presencia de nuestras tropas, para que los enemigos abandonasen la ciudad, y dejasen en nuestro poder un cañón de a cuatro, algunos fusiles y gran cantidad de víveres. Se encontraron en el hospital a los ciudadanos oficiales Mauricio Ayala [3], Manuel Sánchez Salvador [4], Santiago Mancebo [5], José Antonio Peña [6] y Félix Pelgrón [7], y al Teniente Rafael Quintero [8] que junto con otros de los prisioneros que nos hicieron en Yaritagua [9], se hallaba oculto en los bosques.
Por las noticias adquiridas, y el archivo de Ceballos [10], del cual se apoderó el Coronel Villapol, se ha sabido que el segundo Jefe del ejército español Don Miguel Correa [11] murió en la acción del 5; que las fuerzas enemigas que combatieron en este memorable día, componían el número de más de tres mil y setecientos hombres, y entre ellos mil y cuatro cientos de caballería; y que el objeto principal que se habían propuesto era la decapitación de todos los americanos habitantes desde [12] San Carlos [13] hasta Barcelona [14] y Cumaná [15], todo lo que se comprueba con documentos auténticos existentes en poder del Comandante Villapol.
El regimiento español de Granada que acosado de la hambre y alucinado con las ventajas que ponderaba Ceballos, salió de Puerto Cabello [16] el 4 de este mes, se halla entre Montalbán [17] y Nirgua [18] sin poder seguir a Coro [19] por impedírselo nuestro Ejército de Occidente, ni volver a Puerto Cabello por hallarse ocupado de nuevo el Palito [20], que se halla fortificado y guarnecido suficientemente. El General en Jefe ha intimado la rendición al Comandante don Miguel Salomón [21].
La escuadrilla combinada, compuesta de nueve buques de guerra, se halla bloqueando a Puerto Cabello, que ya no puede recibir socorros de ninguna especie, y nuestras fuerzas de mar delante de aquella plaza deben aumentarse dentro de poco.
No se ha hecho mención en los anteriores Boletines de la brillante conducta de la oficialidad en la desgraciada acción del 10 del pasado, ni se han publicado los muertos y heridos, porque habiéndose dispersado muchos, y asesinado los enemigos a varios, se ignoraban cuales fuesen los muertos, y quienes los prisioneros; ahora, aunque no se han tenido noticias exactas, se faltaría al objeto principal del Boletín, si no se recomendase el valor y serenidad que generalmente mostraron en esta jornada los oficiales Generales y de Estado mayor, los Jefes y subalternos de los cuerpos de infantería y caballería, y los de artillería y Zapadores. Perdimos a los valerosos oficiales ciudadanos Capitanes Juan José Bujanda [22], Blas Borges, Policarpo Ribón [23], y Ñ. Pérez; Teniente Benedicto González, y Subtenientes Modesto Barba [24], Rafael Piraces [25] y N. Pereyra que murieron en el campo. Fueron heridos los ciudadanos Teniente Coronel Mauricio Ayala, Capitanes José Antonio Peña, y N. Briceño, y el Subteniente Santiago Mancebo. Por lo que respecta a la caballería, no podemos presentar un estado de los muertos y heridos por haber perecido casi toda; pero es muy recomendable la conducta del ayudante mayor de agricultores, ciudadano Casiano Medranda [26], que murió en el choque.
Es muy de notar que la misma infantería a quien el General en Jefe quitó el nombre y las banderas, que hasta entonces llevaba, por su conducta en Barquisimeto, supo, ganando uno y otro en el campo de Araure, y después de haber sufrido el terrible fuego enemigo a pie firme, apoyada sobre las lanzas de que iba armada, trocar éstas por los fusiles que quitó al enemigo en el campo de batalla.
Cuartel General de Valencia, 14 de diciembre de 1813, tercero y primero.
Por el Mayor General.
TOMAS MONTILLA.
Secretario de Guerra.
* De un impreso de época coetánea. Para la fijación de este documento se ha examinado la hoja suelta publicada por las fechas en que está datado, impresa en Valencia por la imprenta del gobierno; y además el texto inserto en la Gazeta de Caracas, N° XXVI, correspondiente al jueves 23 de diciembre de 1813. La Comisión Editora no ha podido examinar el original manuscrito.