Boletín del Ejército Libertador de Venezuela. N° 14.
Presentamos los detalles de la acción que sostuvo el Ejército de Occidente, como prometimos en el número anterior.
El 13, a las tres de la mañana, emprendió la marcha el ejército de la República desde Barquisimeto [1] al amanecer se encontró con los facciosos en número de mil hombres en los Cerritos Blanco [2] ; nuestras Divisiones dominaron algunas alturas, y después de un fuego vivo de dos horas, se puso en vergonzosa fuga el enemigo, perdiendo toda su artillería, municiones, fusiles y equipajes, dejando en el campo más de doscientos muertos; se les persigue por los bosques, y el Comandante General, ciudadano Ramón García de Sena [3] ofrece entrar hasta el territorio de Coro [4] sin disparar un tiro.
El infame Reyes Vargas [5] , según informe de un prisionero, ha muerto en la acción, después de haber cometido en sus correrías todos los crímenes de que es capaz una alma corrompida; el Padre Torrellas [6] capitanea una partida de revoltosos y huye con ellos precipitadamente.
Por nuestra parte, tenemos la sensible pérdida del ciudadano Capitán Antonio Leanús, que murió de una bala de pedrero, mandando en el centro; este joven es digno de la memoria de sus conciudadanos; su valor, moderación y demás virtudes que le adornaban, le hacían apreciable a sus Jefes y súbditos.
Han sido heridos de gravedad el ciudadano Capitán Josef María [7] Carreño y el Teniente ciudadano Carlos Carabalí, y levemente el de la misma clase ciudadano Josef María Paz.
Toda la tropa, Jefes y oficialidad han llenado su deber; pero se recomienda con especialidad la conducta de los mencionados Leanús, Carreño y Teniente Coronel ciudadano Bartolomé Chávez, a quienes principalmente se debe la victoria.
Por partes oficiales de Mérida [8] sabemos la completa destrucción de los amotinados de Bailadores [9] , que protegidos por algunos soldados de Miyares [10] , sorprendieron aquel pueblo el mes pasado. Las tropas de Cúcuta [11] los han atacado y han logrado dispersarlos y arrojarlos a la Laguna [12] ; siguen persiguiendo a los bandidos, y se trata de cortar los platanales del Zulia [13] después de intimar la rendición a Maracaibo [14] . Han llegado las tropas de la capital a esta ciudad, y el veinte y cuatro entrará otra brigada de la misma; todos los habitantes corren a las armas con una disposición admirable; todo es entusiasmo y deseo de batirse con los enemigos de la Patria.
Es en vano: los tiranos de la España no dominarán jamás en Venezuela; sus hijos han adquirido de nuevo la libertad después de haber sufrido un año de vejaciones y de la más cruel y degradante esclavitud; conocen sus enemigos, detestan sus infames pasiones, y morirán antes en unión de sus mujeres e hijos, envueltos en las ruinas de sus poblaciones, que doblar la cerviz a las fieras que pretenden devorarlos.
Cuartel General de Valencia, 22 de septiembre de 1813, tercero y primero.
RAFAEL DE URDANETA,
Mayor General.
* De un impreso de época coetánea. Juan Baillío, como Impresor del Gobierno, publicó en Valencia, en forma de hoja suelta, este Boletín, y además se insertó en la Cazata de Caracas, correspondiente al jueves 30 de setiembre de 1813, con alguna diferencia que dejamos anotada. La Comisión Editora no ha podido examinar el original manuscrito.