Ilmo. Señor Arzobispo
Con fecha de 19 de Octubre último dije al Ilmo. Señor Arzobispo lo que sigue:
"Según informes parece que los vecinos de Macarao [1] no están conformes con su Cura Párroco, Pbro. Dn. Cristóbal Peraza [2], o por falta de patriotismo sino por su genio fuerte. En estas circunstancias y deseando el Libertador de Venezuela y Capitán General de sus Ejércitos, conciliar la voluntad de los Pueblos y que mientras se provea en propiedad, espera que V.S. Ilma., le promueva a otro Curato equivalente y lo sirva el Presbítero Dn. Juan Subiria [3] Lo comunico a V. S. Ilma, para su inteligencia".
Su Señoría Ilma, con fecha del 21 me acusó el recibo, añadiendo había tenido algunas quejas contra dicho Pbro. Br. Peraza, que conciliaria el deseo de S. E. con la voluntad de los Pueblos. Y como S. E. ha sido informado que el Pbro. Dn. Juan Subiria no sirve, mientras se provee en propiedad, el referido Curato de Macarao, como se previno, ordena lo diga a V.S. Ilma., para que se cumpla su disposición que no ha debido entorpecerla ninguna otra.
Dios guarde a V. S. Ilma, muchos años
Caracas, 1° de Enero de 1814. 4° y 2°.
RAFAEL D. MERIDA.
Al margen: Contestada el mismo día.
* Archivo Arquidiocesano, Caracas. Del original, escrito por un amanuense no identificado. La firma de Rafael D. Mérida es autógrafa. La nota marginal es de otra mano. Facilitó la copia de este documento a la Comisión Editora el Director del Archivo, Fray Cesáreo de Armellada. Sobre el firmante, quien ejercía entonces junto al Libertador la Secretaría de Gracia, Justicia y Policía, véase la nota 1 del Doc. N° 1, en la Correspondencia Oficial. Acerca del destinatario, Narciso Coll y Prat, Arzobispo de Caracas y Venezuela, véase la nota principal del Doc. N° 288 de la Correspondencia Oficial. Tal vez contestó esta comunicación el Provisor. José Antonio Pérez de Velasco, quien se hallaba en Caracas.