DOCUMENTO 7440. OFICIO DE JOSÉ GABRIEL PÉREZ PARA EL MINISTRO DE CHILE EN EL PERÚ, FECHADO EN GUAYAQUIL EL 25 DE MAYO DE 1823, EN EL CUAL, POR MANDATO DE BOLÍVAR, Y PARA EL CONOCIMIENTO DEL GOBIERNO DE CHILE, LE DA UN BOSQUEJO DE LA SITUACIÓN EN EUROPA CON RESPECTO A LA SANTA ALIANZA.""

Sección
22) Período (02ENE AL 31MAY 1823) Correspondencia Oficial

Personas

Lugares

Palabras Clave

Descripción:
{Guayaquil, 25 de mayo de 1823.}

Al Ministro Plenipotenciario de Chile en el Perú.

S.E. el Libertador de Colombia me manda a presentar a V.S., para conocimiento del Gobierno de Chile, un sucinto bosquejo de las noticias de Europa que ha recibido por diferentes conductos. La Santa Alianza ha dado su ultimátum a la España, declarándole en términos formales que debe restituir a su Monarca la libertad y el ejercicio de sus derechos absolutos. La Inglaterra ha autorizado a su Ministro en Madrid para que haga un tratado de alianza ofensivo y defensivo con España contra estos principios. La Inglaterra trabaja con ardor en que ésta reconozca la soberanía de los Esta­dos de la América del Sur, porque es de su interés disminuir a Es­paña el número de sus enemigos y aumentarlos a la Santa Alianza. La Inglaterra sabe que es necesario reconocernos para interesarnos en esta tremenda lucha, o cuando no, para abrir a su industria y manufacturas un inmenso mercado. La Inglaterra sabe que sin el reconocimiento de la Independencia de los Estados de América, la España será acosada y aun aniquilada en su comercio, por nues­tras fuerzas marítimas, y por el estanco y prohibición que hemos

hecho de admitir en nuestros puertos las producciones naturales e industriales de la Península. El Portugal ha propuesto a Buenos Aires una liga defensiva contra la Santa Alianza, compuesta de los Estados Unidos del Norte de América, de la España, de Portugal, de la Grecia y de los independientes de la América del Sur. Esta liga, aunque propuesta por el Portugal, es muy probable que sea sugerida por la Inglaterra, para ponerse ella a su cabeza. La España sabe que no puede salvarse de la irrupción [que la amenaza][ 1 ] de los aliados, sino llamando en su socorro a todos los pue­blos libres de Europa y América. La Inglaterra sabe que si la Es­paña recobrara la soberanía del Perú, continuaría con sus prácticas mezquinas de exclusión, y sabe que aun cuando esto no sucediera, le sería más conveniente apoyar la independencia del Perú que los derechos de España sobre él.

Seguro pues, S.E. de la paz y del reconocimiento de la independencia de los Estados de América que están libres, no cree que este sea el momento de aventurar nada en el Perú a la suerte de las armas. Cree, por el contrario, que cuanto debe hacerse actualmen­te es esperar los resultados de Europa, conservando el Perú la acti­tud amenazadora que actualmente tiene. Tan convencido está S.E. de la realización de sus esperanzas, que está pronto a socorrer el ejército de Colombia auxiliar del Perú, con 30.000 pesos mensua­les en víveres y dinero para mantenerlo, mientras llega el resultado de Europa.

Si el gobierno de Chile pudiera [cooperar a][ 1 ] suministrar la mantención de 2.000 hombres en el Perú, añadiría esta República un nuevo y relevante servicio a los muchos que ha prestado [al Perú][ 1 ] a aquel Estado.

El Libertador piensa que en el acto mismo que tenga la noticia de haberse abierto las negociaciones de paz entre los comisionados del Rey de España y el Gobierno de Colombia, debe él marchar al Perú con 3.000 hombres más. [Y con permiso o sin él del Congreso][ 1 ]. Y así se ejecutará indefectiblemente.

Como el preliminar de toda negociación pacífica debe ser la suspensión de hostilidades, S.E. aprovechará el primer instante para trasladarse con este nuevo contingente [3-000 hombres][ 1 ] al Perú. El gobierno de Chile, si hiciera entonces un esfuerzo en favor del Perú, que es donde los españoles tienen más fuerzas, y donde más

disputarán por esta razón el reconocimiento de su independencia; esta masa de poder aliado, no sólo balancearía el poder español allí, sino que daría al Perú más poder que a sus enemigos, más razones para ser reconocidos, y más justicia a la Inglaterra para intervenir en su favor.

Estas son, Señor Ministro, las [razones][ 1 ] consideraciones que S.E. me manda comunicar a V.S. para que se sirva presentarlas al gobierno de Chile. S.E. se promete de ese Gobierno las más favorables disposiciones en obsequio del Perú, y se promete también que V.S. [apoyará][ 1 ], empleará cerca de él su influjo para obtener para el Perú estos nuevos servicios.

Acepte V.S. las consideraciones de mi respeto.

[JOSÉ GABRIEL PEÍ;

• De un copiador del Archivo del Libertador. Sección O´Lcary. T° XX, F° 42 vto al 44.

NOTAS

1) Tachado en el copiador.
2)
Tachado en el copiador.
3)
Tachado en el copiador.
4)
Tachado en el copiador.
5)
Tachado en el copiador.
6)
Tachado en el copiador.
7)
Tachado en el copiador.

Traducción