DOCUMENTO 1877. DE UNA COPIA O.C.B.CARTA DEL LIBERTADOR SIMÓN BOLÍVAR AL SEÑOR GRAN MARISCAL DE AYACUCHO ANTONIO JOSÉ DE SUCRE, FECHADA EN LA MESA DE JUAN DE DIAZ, 9 DE DICIEMBRE DE 1828. LE RECOMIENDA QUE PRONTO OBTENGA EL TIEMPO EN POPAYAN Y ASEGURAR PARA SEGUIR HACIA EL SUR.

Descripción:
La Mesa de Juan Díaz, 8 de diciembre de 1828.



Al exmo. Señor Gran Mariscal de Ayacucho A. J. de Sucre.

Mi Querido General y Amigo:

He recibido los papeles que me remitió Vd. con Andrade. Ya el mensaje de Vd. queda reimpreso. Interceptada, como está, la comunicación entre el centro y Sur de la república, no puedo escribir a Vd. tan largamente como quisiera. Por lo mismo, me limito a decir a Vd. lo más indispensable.

Venezuela goza de tranquilidad perfecta, unión y adhesión al gobierno. Los departamentos litorales dan pruebas repetidas de amor al orden y de respeto a la administración actual. El centro de la república marcha pacíficamente. Después de la conjuración que estalló el 25 de setiembre, la capital ha manifestado entusiasmo y decisión en favor del gobierno y de la tranquilidad pública. Sólo el Cauca ha sido víctima de la perfidia y de la traición; asi como las fronteras del Sur están expuestas a una irrupción peruana. Una vez comprometido el honor nacional y convertida una parte de la república en un teatro de guerra fratricida, no he debido desentenderme de mis deberes públicos´. Me he resuelto, pues, a colocarme de nuevo a la cabeza de un ejército de reserva de 6 a 7.000 hombres, en cuya organización me ocupo actualmente. 2.000 de ellos forman la vanguardia a las órdenes del general Córdoba, la cual se está reorganizando en La Plata y es probable que obre activamente sobre Popayán en todo este mes.

Mi primer deseo es que Vd. trate de asegurar eficazmente la provincia de Pasto, así para impedir la retirada de los rebeldes por aquella parte, como para aproximar y mantener en contacto las columnas de operaciones que deben obrar contra los facciosos.

En segundo lugar, deseo que Vd. conserve el Sur del mejor modo posible, pero de suerte que si fuere invadido por el ejército del Perú con fuerzas superiores, o aun iguales, no comprometa el de su mando, porque Vd. conoce bien la superioridad que nos dan las fuertes posiciones de Pasto, y que la conservación de ellas es para nosotros de una importancia vital. Además, no sería prudente comprometerse a una guerra exterior mientras los enemigos internos se hallan interpuestos, entre el ejército que debe obrar y el de reserva.

El coronel Mosquera dará a Vd. todos los avisos oportunos acerca de los movimientos de los facciosos; así como de los progresos que hagan las columnas pacificadoras del Cauca.

Tan pronto como obtengamos un triunfo decisivo sobre los rebeldes de Popayán, pienso que sigan al Sur 2 ó 3.000 hombres selectos, sin perjuicio de dejar cubierta nuestra retaguardia, si es que para entonces no se han exterminado del todo las reliquias de la facción patiana.

Soy de Vd., mi querido general, su amigo de corazón.



Bolívar.

Existen dos copias de esta carta en la colección de Pérez y Soto. Una dice:” El original pertenece a la señora Matilde Flores de Hurtado, hija del general J. J. Flores. Dicha dama ha tenido la amabilidad de dejar tomar una copia, para que sea publicada en la revista ´´ Popayán´´ Quito, julio de 1918. —Miguel Arroyo Diez"".

La otra tiene el sello del archivo del señor J. Jijón y Caamaño. Quito.