DOCUMENTO 1811. DEL ORIGINAL.O.C.B. CARTA DEL LIBERTADOR SIMÓN BOLÍVAR AL SEÑOR GENERAL MARIANO MONTILLA, FECHADO EN BOGOTA,30 DE SETIEMBRE DE 1828.LE NOTIFICA LA SITUACION DE LA CONSPIRACION Y LAS MEDIDAS TOMADAS PARA PROMOVER LA REVOLUCIÓN.

Descripción:
Bogotá, 30 de setiembre de 1828.

AL GENERAL MARIANO MONTILLA.

Mi Querido General:

Mando un edecán del general Córdoba a Mompox a buscar el batallón de Carabobo, el que será reemplazado por el de ""Paya"", que marcha por tierra a Ocaña. Ese batallón lleva 500 hombres y van muy mal equipados; necesita además de disciplina.

Ya Vd. sabrá que hemos escapado de una horrible conspiración, pero que se ha descubierto perfectamente y se castigará lo mismo. El general Santander, el general Padilla y el coronel Guerra eran los principales promovedores.

Se le mandarán a Vd., para que los expulse, diferentes individuos; mas los que puedan escribir para volver a promover la revolución aquí, deben ir a Providencia con una guarnición fiel para que no los dejen salir de la Isla, y que Vd. mantendrá mensualmente, pues es muy necesario que no perezcan esos individuos en un lugar que nada tiene.

Ibarrita va bien; Ferguson y Bolívar murieron; y se han pasado por las armas cinco entre asesinos y conspiradores. El coronel Guerra será ahorcado hoy, y seguirán los demás con rapidez, porque es preciso matar esta conspiración.

Memorias a Juan de Francisco y demás amigos que Vd. conoce.

Soy de Vd. de corazón.



Bolívar.

P. D. —El general Córdoba está de ministro interino, porque Urda-neta se halla de juez para que esto vuele: fue preciso que dejara momentáneamente el ministerio para ser comandante de armas.

P. D.—Están todavía por aprehenderse algunos de los principales conspiradores: Carujo, oficial de estado mayor, hombre de poco más de cinco pies, originalmente rubio, pero de una tez ya marchita, y como de veintisiete a veintiocho años. Florentino González, joven como de veintidós a veintitrés años, ojos casi negros, pelo negro, cosa de cinco y medio pies de alto, desdentado adelante, cejijunto, boca grande y labios algo vueltos. Luis Vargas Tejada, delgado de cuerpo, cosa de cinco pies y tres a cuatro pulgadas de alto, cara extraordinariamente larga, distancia de la boca al extremo de la barba bastante excesiva, la barba puntiaguda y poblada; al andar, inclinado adelante con el semblante siempre echado afuera; y era uno de los secretarios de la convención.