DOCUMENTO 663 COMUNICACIÓN DEL LIBERTADOR AL PRESIDENTE DEL CONGRESO DE LA NUEVA GRANADA FECHADA EN PUERTO CABELLO EL 1° DE FEBRERO DE 1814, CON INFORMES SOBRE EL ESTADO DE LA CAMPAÑA*

Sección
5) Período (01ENE AL 07SEP 1814) Correspondencia Oficial

Personas

Lugares

Palabras Clave

Descripción:
Excmo. señor Presidente del Supremo Congreso de la Nueva Granada,

Encargado del Supremo Poder Ejecutivo de la Unión.

Excmo. señor:

El orden se restableció en el Occidente, junto con la fortuna de nuestras armas en la jornada de Araure. Yo tuve el honor de instruir a V.E. en mi última comunicación, de las primeras ventajas obtenidas a consecuencia de esta victoria memorable. En efecto, las ciudades que había invadido el enemigo, han sido libertadas. Una de nuestras Divisiones debe obrar por la Provincia de Harinas sobre San Fernando de Apure, y otra por Carora y Siquisique sobre la ciudad de Coro. Aunque la Provincia de Harinas ha sido perturbada por algunas partidas de facciosos, sin embargo, las fuerzas superiores que la protegen y los socorros destinados a aumentar el ejército principal, disiparán estos embarazos, para que pueda emplearse en su verdadero objeto.

La marcha de nuestras tropas sobre Coro ha sido, es verdad, diferida por otros semejantes accidentes, que pueden aún detener el progreso de nuestras armas; sin que puedan jamás frustrarlo. Una División española de Puerto Cabello, que no pudo reunirse a Yáñez y Ceballos, aunque salió con este objeto, se dirigió entonces hacia Coro, y una parte de nuestro ejército, al mando del Coronel Villapol, tuvo que buscarla, y no obstante que logró batir uno de sus cuerpos en la Guama, del departamento de San Felipe, el resto de la División pudo refugiarse a Coro por los fragosos caminos de la costa. Sin embargo, mil hombres, reunidos ya en Siquisique, efectuarán operaciones más decisivas.

Se ha vuelto a estrechar el sitio de Puerto Cabello, donde los enemigos, reducidos otra vez al pueblo interior y Castillo de San Felipe y bloqueados además por mar, no podrán resistir por muchos días en esta situación desesperada.

Boves, que aprovechó la guerra del Occidente y aumentó sus fuerzas con la sedición propagada en todo el Llano, consiguió derrotar la pequeña División del Comandante Aldao [ 1 ] y poseer de nuevo a Calabozo. Nada le hubiera producido esta corta ventaja, si ella no hubiera alentado a los rebeldes del Llano, que se le han unido de todas partes. Desengañados [ 2 ] entretanto de poder reinar tranquilamente a la vista de nuestras tropas, todo lo destruyen en la impotencia de conservarlo.

Las continuas sublevaciones del Llano, el partido que allí tiene Boves, me hicieron pensar que el golpe que debía descargarse sobre los desorganizadores ha de ser extraordinario, ha de asegurar para siempre un país que nos alimenta y que sin una pronta pacificación será perdido irreparablemente. En consecuencia, solicité los auxilios del Oriente; y el General Mariño, a la cabeza de tres mil hombres, marcha sobre Calabozo, debiendo antes reunirse con una poderosa División al mando del Comandante Campo Elías. Juzgue V.E. si estos movimientos asegurarán un resultado feliz y permanente.

La conquista de Coro y Guayana, que deben seguir a la ocupación de Puerto Cabello y a la destrucción de Boves, pacificarán completamente a Venezuela. Entonces podrán acordarse el Oriente y el Occidente acerca de un Gobierno general, sin cuya precedente medida no podrá afianzarse el Gobierno constitucional de Venezuela.

Dios guarde a V.E. muchos años.

Cuartel General de Puerto Cabello, febrero 1° de 1814. 4° y 2°.

E.S.

SIMÓN BOLÍVAR.

ANTONIO MUÑOZ TEBAR,

Secretario de Estado.

[Al margen]: Tunja, marzo 20 de 1814. Al Congreso para su conocimiento (rúbrica). Pombo (rúbrica), marzo 21-5.— Tunja, mayo 5 de 1814. Enterado el Congreso, vuelva al Poder Ejecutivo. Por el Congreso, Camacho, Vicepresidente (rúbrica). Dávila (rúbrica). C. Valenzuela, Secretario (rúbrica).

* Del original. Archivo del Libertador, Vol. 21, folios 231-232. La antefirma, firma y rúbrica del Libertador son autógrafas. Asimismo la firma, rúbrica y cargo de Antonio Muñoz Tébar. El resto de mano de José Luis Ramos.

NOTAS

1) Se trata de Pedro Aldao (c. 1779-1813).
2)
Está escrito: ""desempañados"".

Traducción