DOCUMENTO 1216. DEL ORIGINAL, O.C.B. CARTA DEL LIBERTADOR SIMÓN BOLÍVAR DIRIGIDA AL GENERAL ANDRÉS DE SANTA CRUZ, FECHADA EN BOGOTÁ EL 21 DE NOVIEMBRE DE 1826, DANDO NOTICIAS DE LA SITUACIÓN POLÍTICA DE PERÚ, ECUADOR, COLOMBIA Y VENEZUELA, MIENTRAS REALIZA SU VIAJE A VENEZUELA PARA ENTREVISTARSE CON EL GENERAL JOSÉ ANTONIO PÁEZ.
Sección
32) Período (02ENE AL 31DIC 1826) O.C.B.
Personas
Lugares
Palabras Clave
Descripción:
Bogotá, 21 de noviembre de 1826.
AL EXMO. SR. PRESIDENTE DEL CONSEJO DE GOBIERNO, GENERAL ANDRÉS DE SANTA CRUZ.
Mi querido general:
Por fin he llegado a la capital de Colombia y ya me preparo para seguir a Venezuela donde me llaman los más caros intereses: los de la patria nativa. Por estas razones no me detengo en esta ciudad, sino el tiempo muy necesario para descansar de las fatigas del viaje que ha´ sido muy, muy penoso, muy desagradable por las continuas lluvias, que aún no cesan.
No habiéndome hecho cargo del poder ejecutivo por razones que no he podido desatender, y, más que todo, por tener que marchar a Venezuela a arreglar los negocios de aquel país: a ver a Páez, a llevar allí mis ideas y mis consejos, no me he ocupado sino en presentar al gobierno, a los ministros, y a cuantas personas de influjo han estado a mi alcance, las necesidades de Colombia, las mejoras que se puedan hacer sobre todo en materia de hacienda, que como tantas veces he dicho a Vd. es la fuente del bien y del mal. El poder ejecutivo y sus ministros, penetrados de cuanto les he expuesto con aquella franqueza y energía que Vd. conoce, están tan convencidos de que es preciso una reforma, que ellos mismos toman ya un interés directo en ellas, puesto que también conocen que éste es el deseo universal de la nación, como lo prueban las actas que se han celebrado en casi todas las ciudades de la república.
Tengo la más completa seguridad de que podré aquietar, sin mucho trabajo, los partidos que han dividido a Venezuela con motivo de las cosas de Valencia y Páez. Este general, aunque por la imprudencia de los escritores públicos se le hizo entender que nada tenía que esperar de mí, sino rigor, se mantiene siempre consecuente a las promesas que me hizo con Diego Ibarra; y esto mismo me lleva volando a Venezuela a fin de aprovechar estos momentos favorables, calmar las pasiones, restablecer el orden y promover aquellas reformas que sean conformes a la voluntad nacional.
He tenido comunicaciones del general Sucre y me dice que allí todo marchaba tranquilo. Me habla con mucha extensión sobre la federación de las tres repúblicas: dice que no dejan de estar inclinados hacia ella, mas ponen por condición que el Perú se divida en dos estados. Lo aviso a Vd. para su gobierno y para que lo haga saber a esos señores del consejo. Me es muy agradable decir a Vd. que el pensamiento de la federación de los seis estados de Bolivia, Perú, Arequipa, Quito, Cundinamarca y Venezuela, todos ligados por un jefe común que mande la fuerza armada, e intervenga en las relaciones exteriores, lo han aprobado mucho aquí, principalmente el Vicepresidente, algunos ministros y las personas influyentes. Han convenido también en que el jefe común sea el que nombre los vicepresidentes, como en Bolivia, para que él mande el estado durante su ausencia. Todo lo demás de hacienda, justicia, interior, sistema y legislación corresponde al estado mismo con casi una absoluta independencia.
Yo espero que Venezuela, por la situación en que se encuentra, por las inclinaciones de aquel país y por mil otros motivos que Vd. podrá penetrar, dará pasos avanzados en esta carrera, porque los jefes militares y, sobre todo, Páez y Urdaneta, ansian mucho por una gran reforma de esta naturaleza. Este proyecto, sobre todo en Colombia, tiene el mérito de poner las cosas, en el día, en estado de que puedan marchar con facilidad y con agrado del pueblo, y de separar los intereses poli-ticos desde ahora para cuando yo falte. No podemos dividir el país sin peligro, porque los españoles o la anarquía nos destruirán y tampoco podemos marchar juntos porque las pasiones han producido antipatías inconciliables.
Con respecto al Perú, no tengo ninguna noticia desde Popayán, que vi a Ibarra y que me trajo sus letras. Sin embargo espero que allí todo marchará en orden y aunque no faltarán sus disgustillos, ¿adónde iremos que se dejen de sufrir?
Expresiones a todos esos señores ministros, Pando, Larrea, Heres: no tengo ninguna de ellos que contestar.
Soy su afmo. servidor y amigo de corazón.
BOLÍVAR
Traducción