DOCUMENTO 11009. CARTA DEL LIBERTADOR PARA EL GENERAL FRAN­CISCO DE PAULA SANTANDER, FECHADA EN LA PAZ EL 19 DE AGOSTO DE 1825, EN LA CUAL LE TRATA VARIOS TEMAS: EL ANUNCIO DE SU ARRIBO A LA PAZ; LA RECEPCIÓN DEL ACTO DE LA ASAMBLEA SOBRE EL NACIMIENTO DE BOLIVIA; LA MI­SIÓN ARGENTINA QUE LE RUEGA PASE AL RÍO DE LA PLATA A PONER ORDEN EN LA SITUACIÓN POLÍTICA; LAS CARTAS DEL PADRE FUNES; LA ESCASES DJE OFICIALES; LA LLEGADA DE TROPAS A COLOMBIA; LA LLEGADA DE LUIS LÓPEZ MÉNDEZ A BUENOS AIRES, Y SOBRE EL CASO DE LA BANDA ORIENTAL.*

Sección
30) Período (02JUL AL 31AGO 1825) Correspondencia Oficial

Personas

Lugares

Palabras Clave

Descripción:
La Paz, 19 de agosto de 1825.

Señor General Francisco de Paula Santander.

Mi querido general:

Ayer he llegado a esta patriótica ciudad y he sido recibido, como era natural, con mil demostraciones de bondad y agradecimiento. El orador de la fiesta de este día me ha querido hacer monarca con no poca sagacidad y genio. En fin, esto está en grande. Hoy he recibido una acta de la asamblea del Alto Perú, que se declara independiente y toma el nombre de Bolívar y la capital Sucre, y un millón de pesos de recompensa al ejército después de un mil otras cosas honoríficas a nosotros. El día de Junín se ha decla­rado independiente esta nación y república independiente. ¡Qué hermoso nacimiento entre Junín y Boyacá! Parece engendrado este estado por el matrimonio de estas dos repúblicas. Ud. debe imaginar si yo debo defender este hijo precioso de mi gloria y de Colombia.

Viene una misión a felicitarme de parte de Buenos Aires, y según dice un hermano del secretario de estado de aquella república, que se halla aquí, dicha misión viene a rogarme que pase al Río de la Plata a arreglar sus negocios. Todo el pueblo argentino, todos los buenos patriotas y hasta el gobierno mismo, no esperan nada de bueno sino de mí. El padre Funes [ 1 ] me escribe hoy tres cartas hablándome de sus negocios y de los asuntos públicos. Dice que el gobierno se ha llenado de terror pánico al saber que yo estoy en el Alto Perú y que, por lo mismo, han querido congratularme con su adhesión al encargo que le dio el gobierno de Colombia. El me añade que no ha admitido la comisión, porque no tendría de que vivir, pues entonces no le pagarían las dietas de diputado en el congreso. El doctor Funes hará todo lo que se quiera y está loco por merecer la confianza del gobierno de Colombia.

Pienso mandar a Ud. ahora el acta de recompensa a los libertadores del Alto Perú y también mandaré a Ud. un artículo de El Constitucional de París, escrito seguramente por el abate De Pradt por su estilo y por las ideas. Todo esto lo he recibido hoy en medio de las fiestas que nos están dando aquí. Amigo, estas cosas lo alimentan a uno para poder llegar al tér­mino de su carrera. Aunque yo no soy ambicioso, no puedo menos de ser sensible a tales demostraciones de bondad y de lisonja. Bastantes me han injuriado, luego parece justo que algunos me alaben, habiendo hecho yo lo que he podido por el bien de los hombres y de los buenos principios.

Deseo que los negocios por allá vayan tan bien como por acá. Sólo los brasileros dan alguna inquietud a Buenos Aires: lo que puede ser la causa de una curación radical de sus males. La Europa no nos amenaza, según entiendo, luego todo va a las mil maravillas.

Reciba Ud. los sentimientos de mi amistad y de mi corazón.

[BOLÍVAR]

P.D.: No le mando a Ud. las propuestas de los oficiales que he as­cendido, porque Pérez, que era mi secretario general, se ha quedado en la Costa enfermo, y Espinar, que es el que he nombrado después, también se ha quedado enfermo en Huamanga. Por mis anteriores cartas estará Ud. en la inteligencia de que voy a mandar a Colombia 5.000 hombres, pues entienda Ud. que sólo van en este año 3.000 hombres de este modo: 1.600 que se embarcarán en todo septiembre de las divisiones de Lara y Córdova en los puertos de Arica y Quilca y 1.400 que saldrán del Callao, luego que se rinda, de las tropas que lo sitian, lo que probablemente será por octubre o noviembre. Todos estos 3.000 hombres, a excepción de los jefes, oficiales y algunos sargentos, serán peruanos, los que nos servirán allá mucho más que por acá por mil razones. Sería muy conveniente que Ud. no perdiese tiempo en mandar buques a Chagres para llevar estas tropas al lugar que Ud. las destine, pues si las dejan en Panamá perecen todas y ciertamente que no merecen esta suerte.

Dispénseme Ud. que a lo último esta carta le hable de lo que más nos interesa, nuestras mismas cosas. Estas fiestas le quitan a uno el tiempo.

Sabrá Ud. que nuestro don Luis López Méndez [ 2 ] ha llegado a Buenos Aires, y parece que quiere venir por acá. Dígame Ud. algo sobre la conduc­ta que ha tenido últimamente este caballero, pues yo nada sé.

P.D.: Acabo de saber que once buques de guerra y un refuerzo poderoso ha llegado a Montevideo con el objeto de forzar a Buenos Aires a renunciar la Banda Oriental o a abrir las hostilidades: todo esto pone en el mayor conflicto al Río de la Plata y aun debe inquietarnos a nosotros por lo futuro, pues todos los monarcas son cofrades de la Santa Alianza y esta es un abismo donde van a sepultarse, de todas partes, las leyes y la libertad. Alerta, pues, que yo lo estoy.

* De un impreso moderno: Simón Bolívar, Obras Completas, tomo II, pp. 201-202. El compilador dice que ha tomado ""del original"" el texto de esta carta, pero omite infor­mación atinente a este original.

NOTAS

1) Gregorio Funes (1749-1829), llamado el ""deán Funes"", sacerdote, político y escritor argentino. Hizo causa común con la empresa emancipadora de su patria, y formó parte de la Junta de 1810. Es autor de varias obras.
2)
Para información acerca de Luis López Méndez, véase tomo IV, de la presente colección, docu­mentos N° 59, nota principal.

Traducción