Cuartel general de Trujillo, a 18 de octubre de 1820.
Al Excmo. señor Vicepresidente de Cundinamarca, General de División Francisco de Paula Santander.
He aplaudido mucho las disposiciones de V.E. para que el ejército del Sur se disponga a marchar. La expedición de Chile sobre el Perú debe facilitar la ocupación de Quito, y es menester aprovechar una ocasión tan favorable a nuestros intereses. Los enemigos de Quito perderán en su opinión, en sus recursos y en sus medios de defensa con la expedición del general San Martín a Lima y, por consecuencia, es la más bella oportunidad para que el ejército del Sur dé la libertad a aquel país.
Con las armas, municiones, etc., con que V.E. ha reforzado aquel cuerpo debe ya hallarse en una aptitud ofensiva y con las probabilidades de no sufrir ningún revés; he resuelto pues que el general Valdés, el general Mires, o cualquiera otro jefe que le suceda en el mando, marche al momento a fin de que en el caso de algunas negociaciones con la España, el territorio de Quito esté todo ocupado. V.E. dará las instrucciones que dirijan esa campaña.
El general Urdaneta está enfermo y no podrá soportar fatigas en mucho tiempo; existe en Cúcuta, curándose, y por tanto, aun cuando quisiera enviarlo al Sur por complacer a V.E. separándolo de su destino aquí, que es de no poca importancia, el tiempo que necesita para su restablecimiento y el del viaje es el que considero suficiente para terminar esa campaña.
Dios guarde a V.E. muchos años.
BOLÍVAR
Al margen: Contestado en 13 de noviembre. (Rúbrica de Santander).
* De un impreso moderno. "Cartas del Libertador" (Fundación Boulton), volumen XII, págs. 215-216.