San Cristóbal, junio 6 de 1820.
Al Gobernador Comandante General del Socorro.
A un tiempo he recibido los dos oficios de V.S. fecha 28 y 29 del próximo pasado, cuyos contenidos han sido elevados al conocimiento de S.E.
El número de hachas y hachuelas que V.S. ha remitido es suficiente para los pocos trabajos que faltan en el astillero. La mayor parte de la flotilla mandada a construir está construida. Son pues necesarios los nuevos instrumentos que V.S. ha mandado hacer.
La multa pedida al Presbítero Luis Sarmiento, y que debía satisfacer su padre, no tiene lugar ya puesto que aquél ha mandado suspenda V.S. toda providencia contra él, haciéndole saber que su hijo ha alcanzado la gracia de permanecer en Cúcuta.
No sé en que haya consistido el extravío de la correspondencia en que oportunamente comuniqué a V.S. que debían ir al Socorro y a Vélez 1.000 libertos de Antioquia en depósito para que se disciplinen bajo la inspección y órdenes del señor Coronel Briceño y del Comandante del batallón Vargas.
Dios guarde, etc., etc.
PEDRO BRICEÑO MÉNDEZ
* Del copiador de la Secretaría. Archivo del Libertador, O’Leary, tomo XVII, folios 28 vto., al 29, segunda parte.
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