.
Portada del sitio > 34) Período (02ENE AL 26DIC 1828) O.C.B. > DOCUMENTO 1710. “DIARIO DE BUCARAMANGA”. 237. (PARÍS). O.C.B. CARTA DEL (...)

DOCUMENTO 1710. “DIARIO DE BUCARAMANGA”. 237. (PARÍS). O.C.B. CARTA DEL LIBERTADOR SIMÓN BOLÍVAR AL CORONEL LUIS PERÚ DE LACROIX. FECHADA EN EL SOCORRO EL 16 DE JUNIO DE 1828. INFORMANDO QUE LAS ÚLTIMAS NOTICIAS DE LA GRAN CONVENCIÓN LO OBLIGA A MARCHAR PARA BOGOTÁ; EXPONE QUE A DIFERENCIA DE LA MAYORÍA DE LOS DIPUTADOS, ÉL ANHELA UNA CONSTITUCIÓN QUE DÉ ESTABILIDAD Y GARANTÍAS AL GOBIERNO Y AL PUEBLO.

El Socorro, 16 de junio de 1828.

Al SEÑOR CORONEL LUIS PERÚ DE LACROIX.

Montúfar, a quien vió Vd. en esa, ha llegado hoy a las doce y media del día; me ha informado de lo ocurrido en Ocaña, que no comunico a Vd. porque me ha dicho haberlo hecho él mismo. Pero ¡cosa singular! hacia apenas media hora que estaba con el comandante Montúfar, cuando entró en mi cuarto el coronel Bolívar trayéndome la noticia de un movimiento popular ocurrido en Bogotá el día 13 de este mismo mes,movimiento que produjo un acto por el cual se desconoce la convención, todo lo que haga o haya hecho y se me nombra dictador. Asi es que en menos de media hora jhe recibido en esta ciudad dos grandisimas noticias: la de la separación de veinte diputados de la gran convención nacional, que ha debido ser causa de su disolución y la de la revolución en la capital de la república contra la misma convención y los demagogos. Todo esto me obliga a marchar mañana 17 precipitaciones para Bogotá, donde pienso llegar el 20 o 21 del presente. allí recibiré las ulteriores noticias de Ocaña, que me interesa conocer. No deje Vd. de informarme de cuanto llegue a su conocimiento y de enviarme volando las cartas que reciba para mí. El general Soublette no sigue conmigo para Bogotá, y regresa a esa parte de ahi seguir a Venezuela. Ya tenemos un desenlace, o más bien, un resultado de las locuras de la convención. Su vergonzosa disolución y los actos populares, porque el de Bogotá va a promover otros en toda Colombia, no es lo que deseaba, porque semejantes sucesos no afirman la república, son al contrario, golpes que no sólo conmueven sus cimientos sino que echan a perder la moral pública, la obediencia y el respeto de los pueblos, acostumbrándolos a las inconstancias políticas, a las sediciones y a los excesos populares, Lo que yo anhelaba era una buena constitución análoga al pais y a todas sus circunstancias, un código capaz de afianzar el gobierno y hacerlo respetar; capaz de dar estabilidad a las instituciones, garantías a todos los ciudadanos y toda la libertad e igualdad legales que el pueblo colombiano es suceptible de recibir en el actual estado de su civilización; finalmente, una constitución en que los derechos y los deberes del hombre fuesen sabiamente calculados, como igualmente los de­beres y facultades de las autoridades. La convención no lo ha querido; la mayoría de sus diputados, alucinados, los unos por falsas teorías, y los otros dirigidos por su maldad y por miras personales, han preferido el desorden al orden, la ilegalidad a la legalidad, más bien que ceder a la razón, a la voz de la patria y al interés general. Todo esto me confunde, me quita mi energía y enfria hasta mi patriotismo; y, sin embargo, más que nunca necesito de ellos para sobrellevar la pesada carga que está sobre mis hombros.

BOLÍVAR.

| | Mapa del sitio | Seguir la vida del sitio RSS 2.0