Angostura, 4 de noviembre de 1817. Al General Zaraza.
[Acuso] a V.S. el recibo de sus oficios de 18 y 20 de octubre último fechados en San José [1] Es imposible entender lo que V.S. ha querido decirme en su oficio del 20. Sus conceptos y sus expresiones son todas obscuras, y casi ininteligibles. Escríbame V.S. con claridad y con sencillez, y sobre todo con extensión; pues la pequeñísima correspondencia de V.S. me deja siempre todo lleno de dudas. Nunca sé ni he podido saber, a pesar de que se lo he [2] repetido constantemente a V.S., el verdadero estado de sus fuerzas, armas, municiones y caballos, su posición, la del enemigo, las fuerzas de éste, sus intenciones y maniobras. Cuando V.S. me escribe lo hace siempre tan de prisa que omite hasta lo más sustancial. Para estas horas no me acusa V.S. más que el recibo de mis comunicaciones de 3 y 4 de octubre, y extraño mucho no hayan llegado a manos de V.S. las de 11 y 17 del mismo mes que le he dirigido por conductos muy seguros. Igualmente que las que le he despachado con fechas de 23 y 24 del mismo octubre [3], cuyo exacto cumplimiento reitero a V.S.
La División que actualmente manda V.S. es quizá la más respetable que tiene actualmente la República, y a la que se ha enviado mayor número de hombres, armas y municiones. Debe estar completamente organizada y disciplinada y debe reinar en ella el orden y la severidad militar. V.S. tiene cuantos medios se necesitan para ello. Reitero mi orden del 4 de octubre de que cada quince días dé V.S. al Estado Mayor General, estados formales, conforme a los modelos que se le han enviado, de la fuerza efectiva de toda la División.
Tome V.S. el más vivo interés en examinar la posición, fuerza, número, intenciones y recursos del enemigo, y particípemelas siempre para mi inteligencia.
Con esta fecha he ordenado al señor General Monagas [4] que publique una [5] proclama en toda la Provincia de Barcelona para que todos los desertores de la División del mando de V.S. sean aprehendidos y perseguidos de muerte, y remitidos a disposición de V.S. bajo la correspondiente custodia. De este modo encontrándose sin abrigo ni refugio, serán castigados o cesará la deserción.
El Padre Sutil [6] que V.S. me dice le envió Morillo [7] incluyéndole un indulto, debió haber sido remitido por V.S. a mi Cuartel General con todos los papeles que condujo y con toda seguridad; para haber tomado de él todos los informes necesarios y las medidas que el Gobierno hubiera estimado convenientes; pues aunque creo muy bien que las supercherías de Morillo no podrán tener [8] ningún influjo sobre los republicanos, sin embargo sólo al Gobierno toca conocer de esta clase de emisarios. Sírvale, pues, a V.S. de gobierno para lo sucesivo, advirtiendo lo mismo a los campos volantes y destacamentos de la División del mando de V.S. Para estas horas ya se habrá incorporado con V.S. el señor General Torres [9] con la columna que conduce.
Dios guarde, etc.
[BOLÍVAR]
* Del copiador. Archivo del Libertador, vol. 24, fol. 138-139. Escrito de letra de Jacinto Martel. Para las características del cuaderno copiador, véase la nota principal del Doc. N° 2166. El destinatario era el General Pedro Zaraza, sobre quien puede verse la nota 25, del Doc. N° 1472,.