Al señor Subjefe del Estado Mayor General.
Después de varias comunicaciones entre S.E. el Libertador y el General Morillo, se ha acordado, por fin, un armisticio provisorio entre estos dos ejércitos, mientras se arregla y concluye el tratado definitivo con los comisionados españoles, que se aguardan dentro de cuatro o cinco días; siempre que conocida la naturaleza y bases de esta negociación, convenga con los intereses y principios fundamentales de nuestro Gobierno.
Nuestro ejército está en sus ventajosas posiciones de Sabana Larga; sólo un batallón ha marchado a esta ciudad.
Barinas ha sido ocupada por el Comandante Romero, y el Coronel Juan Briceño debe reforzarlo con su regimiento de caballería, compuesto por lo menos de 700 hombres para sostener a toda costa aquella capital.
El Libertador repite a US. sus últimas órdenes, sobre los batallones que deben marchar a este Cuartel General; sobre municiones volando; sobre fusiles; sobre medidas de ganado, y sobre cuanto sea útil y necesario a este ejército. S.E. previene que luego que US. se haya impuesto de las comunicaciones que se le incluyen entre S.E. y el General Morillo, las haga copiar y remita al Vicepresidente de Venezuela participándole nuestra actual actitud, y seguidamente las remitirá al Vicepresidente de Cundinamarca, para quien van dirigidas.
Mañana, contestaré a US. sus comunicaciones pendientes.
Dios, etc.
Trujillo, noviembre 18 de 1820.
PEDRO BRICEÑO MÉNDEZ
* De un impreso moderno. O’Leary, "Memorias"; tomo XVII, pág. 562.
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