A los Honorables señores Ignacio Herrera, Domingo Burgos, Antonio Urane, José Antonio Borrer, José Ignacio Sanmiguel, Manuel Camacho, J. F. Pereira y José Miguel Pey [1].
Las razones que USS. manifiestan en su exposición de 20 de setiembre las he considerado con el peso que tienen; sin embargo, no está en mis facultades ceder a ellas. El Poder Ejecutivo se halla autorizado para remover los obstáculos que puedan retardar la instalación del próximo Congreso de Colombia para el 1° de enero próximo, para variar la Ley fundamental de la República que ha señalado el lugar de su reunión. Un paso contrario que el Ejecutivo diese por este u otro motivo se vería siempre como un acto de violación a la primera ley del Estado, particularmente cuando los Constituyentes de USS. han dado sus poderes por esta ley. Emanando del Cuerpo Legislativo la decisión a la solicitud que USS. hacen, ya ésta puede tener lugar reunidas las dos terceras partes de sus miembros.
Daré algunas razones que contrarían a las que USS. han expuesto, sin duda por informes inexactos. La Villa del Rosario [2] y sus inmediaciones han sido desocupadas del ejército, con el doble objeto de acercarlo al enemigo, de dejar sus alojamientos para los Diputados y de que la instalación del Congreso sea más libre y más libre para deliberar. Los víveres se hallan en aquel territorio, su temperamento es selecto, e igualmente que antes y al mismo precio; el sostenimiento de los Representantes y miembros del Gobierno le es allí infinitamente menos costoso que en una ciudad de lujo en que nuestro Erario no bastaría al mantenimiento de la estructura de un Gobierno en las escaseces en que se halla. Es cierto que en Cúcuta no hay las librerías que USS. desean para ilustrar sus discusiones, y también considero el largo viaje que tienen USS. que emprender para hacer un servicio a la Patria.
Para cuando los Diputados se hallen reunidos en el ejercicio de sus funciones, el ejército del Sur estará tal vez aproximándose a Quito y entonces, como cuerpo constituyente, podrá variar el lugar de la residencia del Gobierno. En tanto repito que no está en mis facultades hacerlo.
Presento a USS. estas razones para persuadirlos que han sido equivocadamente informados con los embarazos que les han figurado, y por nada deben retardar la instalación del Congreso, cuyo acto será sincera y vehementemente en favor de los intereses de Colombia.
Dios guarde, etc.
Trujillo, noviembre 1° de 1820.
BOLÍVAR
* De un impreso moderno. O’Leary, "Memorias"; tomo XVII, págs. 532-533.