La Guaira, 21 de agosto de 1812
Autorizo a mi tío Don Juan Nepomuceno Ribas, para que se sirva reclamar y tomar a su cargo mi equipaje q.e tiene en su poder Don Tomás Acosta [1], con mil y quinientos pesos en plata y mil seiscientas onsas de plata. Además, Mr. George Robertson, tiene a su cargo cinco zurones de tinta [2] y 26 f.s [3] de cacao, q.e podrá reclamar también, o su valor. Y para q.e conste en donde quiera firmo éste.
SIMÓN BOLÍVAR.
* Archivo del Libertador, vol. 167 f° 7 el original enteramente autógrafo, y en el vol. 171 f° 259 existe una copia, de mano de Arístides Rojas, que lleva al pie la nota siguiente: "copia del original, en poder hoy de la familia Alderson". Don Juan Nepomuceno Ribas Herrera, a quien se le concedía esta autorización, era tío político de Bolívar, por su matrimonio con doña María de Jesús Palacios Blanco, hermana de doña Concepción. Durante la primera República, Ribas se había mantenido más bien alejado de la política activa; más tarde, durante la guerra a muerte, sirvió como Director General de Rentas al lado del Libertador, y emigró en 1814 al Oriente, en donde al parecer murió alanceado meses después. La fecha de esta carta plantea ciertos problemas, al ser comparada con los escasos y no siempre seguros datos que suministra para esa época la cronología de Bolívar. Se sabe que éste se hallaba en La Guaira durante la noche del 30 al 31 de julio de 1812, cuando participó en la prisión del General Miranda, y que al verse imposibilitado de llevar a cabo la reacción militar contra el jefe realista Domingo de Monteverde, regresó clandestinamente a Caracas el 1° de agosto, y halló refugio, el día 2, en casa del Marqués de Casa León, Antonio Fernández de León; se ha supuesto que fue el 26 de agosto cuando su amigo don Francisco Iturbe le llevó a la Casa de Gobierno, en Caracas, para que recibiese el pasaporte que le permitiría abandonar el país, lo cual verificó embarcándose en La Guaira el día 27. El 1° de septiembre, estaba en Curazao. Su presencia en La Guaira es decir, "zurrones de añil". El 21 de agosto podría conjugarse con los datos anteriores, si se supone, o bien que se trasladó a ese puerto antes de recibir el pasaporte, tal vez con el objeto de preparar su viaje, y regresó luego a Caracas, o bien que en realidad el pasaporte le fue entregado no el 26 de agosto (fecha dudosa, como se ha dicho) sino antes, tal vez el 20 o el 21, y que Bolívar bajó entonces a La Guaira, pero no halló ocasión de embarcarse sino el 27. Estas conjeturas, que se exponen tan sólo como tales, sin otra pretensión, sirven únicamente para demostrar el escaso conocimiento que aún hoy se tiene de aquel período de la vida de Bolívar.
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